La mejor solución para prevenir la caries es mantener una correcta higiene bucodental.
En el caso de tener una caries en una pieza dentaria, lo mejor es proceder a realizar una restauración ya que si no se trata a tiempo puede derivar en un problema más grave, como afectar la parte interna del diente llegando a la pulpa dental, necesitando en este caso un tratamiento llamado endodoncia.
Las caries se originan por la acidez de los alimentos, que, si no son eliminados después de ingerirlos, pueden afectar al esmalte hasta llegar el punto de originar la caries.
Por este motivo, si quieres prevenir la caries y que el empaste sea más duradero, deberás llevar una higiene bucodental estricta y correcta.

Por lo general, la vida media de un empaste es de 4 a 10 años. Todo depende de su cuidado bucodental. Aunque también influye donde este localizado el empaste.
Las caries se originan por la acidez de los alimentos, que si no son eliminados después de ingerirlos pueden afectar al esmalte hasta llegar el punto de originar la caries.

Por este motivo, si quieres prevenir la caries y que el empaste sea más duradero, deberás llevar una higiene bucodental estricta y correcta.

Hay dos tipos de empastes comunes, el empaste de metal o el empaste de resina.
Las diferencias entre el empaste de metal y el empaste de resina son:

· El empaste de metal es más duradero, llegando a durar en el tiempo hasta 30 años, pero estéticamente desentonará con el resto de los dientes.

· El empaste de resina mantiene la tonalidad del diente, pero su duración es menor. Destaca en su uso los empastes de cerámica o de composite.

Por otro lado, también se puede proceder a la reconstrucción del diente. Esta se realiza cuando la infección de la caries ha alcanzado a toda la extensión del diente.

Si el problema no se pudiera arreglar con la reconstrucción del diente, se debería proceder a realizar una endodoncia.